Crimen
y Castigo: El fin no justifica los medios
Juan
Carlos Patricio Jarama
La
obra pertenece al género Narrativo y es una novela de carácter psicológica,
abarca multiplicidad de sentimientos, emociones, ideologías y otros elementos
que integran la psicológica de una persona, novela extrapolable a cualquier
época ya que el remordimiento es uno de los peores castigos que puede recibir
un criminal.
Desde que inicias la lectura te envuelves en el ambiente
de penuria y necesidad donde Raskolnikov inicia el viaje a su propia
confrontación interior a partir de sus decisiones; tomadas desde su
perspectiva, en la que cree que un ser superior o extraordinario permite de
facto quebrantar el orden, en su caso, asesinando a la vieja usurera Aliovna.
Así, Dostoievsky se vale de una trama vulnerable a un
análisis psicológico del ser humano donde la dualidad entre lo racional y lo
irracional, entre la vida y la muerte, entre la soberbia y la humildad pasando
desde al crimen hasta el castigo, hacen que sea una obra universal y atemporal
haciendo de ésta novela con un gran intensidad analítica, donde maneja una
apología filosófica de la existencia.
El autor hace que por momentos te encuentres engañando
con sus palabras, por decir un ejemplo por un momento dudé de la inocencia se
Sonia cuando se le inculpaba el robo de los 100 rublos, o Porfirio con su
"psicología" que al final admitió la intención de hartar a
Raskolnikov hasta que confesara.
Una de las partes tristes de la obra es cuando Katerina
es arrojada a la calle y completamente loca pone a cantar y a bailar a los
pequeños, les pega y los regaña al no recordar canciones francesas, para que
vean que son una familia con clase menor.
La pregunta es ¿Podemos llamar criminal a un hombre que
ha matado a un "gusano", que le ha hecho bien a la humanidad o a su
comunidad? "podría ser un gusano pero sigue siendo un hombre" Como lo
dijo Sonia, por supuesto que es un crimen matar a alguien por detestable que
sea. Pareciera, como pensaba Rasakolnikov, que mientras más personas se mate
más se le admira y se le pone en un pedestal, en un trono y al que mata
simplemente a una se le considera lo más bajo de la sociedad un
"asesino" despiadado, ¡matar a hachazos a un par seres humanos! ¡que
repugnante! Creo que Rousseau dijo que la persona que comete un crimen debe
dejar de pertenecer inmediatamente a la sociedad pero cuando se arrojan bombas
atómicas sobre más de 200,000 personas a muchas les parece digno de elogio y
admiración. Para finalizar. ¿Es para mí valido asesinar a un
"gusano"? NO. Un gusano menos en las sociedad en que vivimos es como
tratar de sacar a cubetas el agua del océano, se tendría que matar a miles, por
lo tanto es fútil vivir con la consciencia a punto de locura al saber que se ha
asesinado a un hombre o a unos. Supongo que debemos vivir con cualquier tipo de
personas por desagradables que sean, a fin de cuentas de eso se trata el
"vivir".
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